En muchas ocasiones os hemos contado lo importante que es para la mujer tener en cuenta el reloj biológico, un aspecto que no debe descuidarse a la hora de buscar el embarazo. El reloj biológico puede estar condicionado por varios aspectos, tanto internos como externos a la mujer, como la edad o hábitos relacionados con el estilo de vida, entre ellos la dieta. Por todos es sabido el poder que tiene la alimentación en las personas, bien conocida es la frase «somos lo que comemos», y una de las facultades que tiene la alimentación sobre la fertilidad es que la dieta altera el reloj biológico.
¿ Por qué la dieta altera el reloj biológico ?
La alimentación no solo repercute en el cuerpo a nivel nutricional sino que la dieta incluso altera el reloj biológico. Un equipo de investigadores han hecho pública su investigación en ‘Cell Reports’, en la que revelan nuevos conocimientos sobre cómo ajustar el reloj biológico a través de la manipulación de la dieta, para ayudar a pacientes con diversas condiciones.
El reloj biológico o ‘circadiano’ interno juega un papel importante en las horas de sueño, los tiempos de estado de alerta y el momento de ciertos procesos fisiológicos, entre ellos el quedarse embarazada. El reloj permite la máxima expresión de genes en el momento adecuado del día, lo que permite a los organismos adaptarse a la rotación de la tierra. «La desincronización crónica entre los ritmos fisiológicos y ambientales no sólo disminuye el rendimiento fisiológico sino que también conlleva un riesgo significativo de diversos trastornos, como la diabetes, enfermedades cardiovasculares, trastornos del sueño y hormonales, e incluso cáncer», afirma el doctor Makoto Akashi, integrante de la investigación.
¿De qué manera puede afectar la dieta?
Ajustar la dieta con el reloj biológico es muy importante, ya que un desequilibrio en este aspecto puede producir consecuencias negativas en la salud.
Comer cualquier cosa y no dormir las horas necesarias o de forma desordenada, hace que el cuerpo altere sus ritmos naturales y de esta manera se tengan problemas para dormir o problemas de digestión, entre otros malestares. Las dietas altas en grasas también suelen desequilibrar el ritmo biológico por lo que se debe evitar el consumo regular de este tipo de alimentos. Personas que viajan mucho y acostumbran a tener «jet lag» suelen ser las más propensas a este tipo de problemas.
Una alimentación correcta en el momento adecuado hará que la persona se sienta mejor y además se reduzca el riesgo de sufrir enfermedades o si se las padece no complicarlas.
¿Cómo ganarle la batalla al reloj biológico?
Cuando el reloj biológico está en riesgo de ser alterado por otros factores como la edad, la reproducción asistida se convierte en una gran aliada para ganarle la batalla . Esto es posible gracias al tratamiento de vitrificación de óvulos, una técnica que ha supuesto una gran revolución para las mujeres, permitiendo retrasar el momento de ser madre hasta que se desee, sin preocuparse por el reloj biológico. Puedes leer más sobre este tratamiento AQUÍ.
