Si estás inmersa en un tratamiento de fertilidad, seguro que ya estás familiarizada con la hormona anti-mülleriana y conoces la importancia de la misma. Sin embargo, las que estáis dando los primeros pasitos en reproducción asistida, es posible que os suene este nombre, pero todavía desconozcáis el por qué de la importancia de esta hormona en fertilidad. Hoy resolvemos vuestras dudas y os contamos las funciones de la misma.
Importancia de la hormona anti-mülleriana
La hormona anti-mülleriana (AMH) es una hormona muy útil en reproducción asistida, pues aporta información valiosa a los especialistas acerca de la paciente. Se trata de una sustancia que segregan los folículos ováricos y que su análisis permite proporcionar información sobre los óvulos disponibles que presenta la mujer, y por ende su reserva ovárica. Conocer esta información es muy importante para actuar a tiempo, en caso de ser necesario. Os contamos todo lo que debes saber sobre esta hormona:
- La primera función de la AMH aparece durante la diferenciación sexual del desarrollo embrionario, siendo esta sustancia la responsable de diferenciar los órganos reproductivos masculinos y femeninos en el embrión cuando está en el útero materno.
- Una vez la mujer alcanza la edad adulta, ésta hormona adquiere una función muy útil en reproducción asistida, pues como comentábamos ayuda a medir la reserva ovárica, es decir, los óvulos que nos quedan almacenados en el ovario y que se pueden seguir utilizando en los próximos años. La hormona anti-mülleriana desciende con la edad.
- Los niveles de AMH no varían mucho a lo largo del ciclo menstrual y por lo tanto se puede medir en cualquier momento del mes.
- La información sobre esta hormona también es muy útil en reproducción asistida a la hora de suministrar la medicación, pues los valores de la anti-mülleriana en sangre predicen la respuesta que va a tener el ovario en los tratamientos de FIV/ICSI. Los niveles elevados informan de que se obtendrá un mayor número de óvulos, mientras que los niveles bajos predicen una respuesta ovárica disminuida. Cuando los niveles de AMH son mayores de 3.5 ng/ml, hay más riesgo de que se produzca un síndrome de hiperestimulación ovárica, lo cual es de gran ayuda la hormona para prevenirlo.
- Por último, analizar la hormona anti-mülleriana también es de gran utilidad para las mujeres que han tenido una operación quirúrgica en los ovarios, o que han pasado por un tratamiento de quimioterapia o radioterapia, pues permite valorar el daño ovárico que estos tratamientos han podido ocasionar.
