El endometrio es la capa mucosa que recubre internamente el útero, y es el lugar donde se produce la gestación. Se engrosa durante el ciclo menstrual para permitir que el embrión se implante correctamente y tenga lugar así el embarazo. Cada mes, si no hay embarazo, el tejido endometrial se desprende con la menstruación, y se renueva.
Las diferentes capas del útero
- Perimetrio (capa externa). Es la capa serosa externa del útero. Facilita el contacto entre el útero y los órganos abdominales adyacentes.
- Miometrio (capa intermedia). Es la pared muscular del útero. Durante el embarazo, esta capa se extiende y se expande para facilitar el crecimiento del feto. Su función también es la de contraerse durante el parto para impulsar al feto fuera del útero.
- Endometrio (capa interna). Se refiere a la capa mucosa interna del útero. Su función principal es permitir la implantación del embrión, además de nutrirlo hasta que se forme la placenta (el saco gestacional). En caso de que no se produzca la fecundación, esta capa se expulsa dando lugar a la menstruación.
Las capas del endometrio
El tejido endometrial es de naturaleza regenerativa y está formado por múltiples vasos sanguíneos y glándulas, que se forman y expulsan en cada ciclo menstrual. El endometrio se divide en dos capas:
- Capa basal. Es la capa más profunda, y la más cercana al miometrio. Aquí se encuentran los vasos sanguíneos y las células madre que generan la capa funcional.
- Capa funcional. La capa externa del endometrio cuyo tejido cambia a lo largo del ciclo menstrual. Si no se produce embarazo, la capa funcional del endometrio se necrosa y se descama al final del ciclo menstrual produciendo el sangrado (menstruación).
Este sangrado marcaría el inicio del nuevo ciclo menstrual, donde la capa funcional del endometrio prolifera de nuevo gracias a las células de la capa basal.
La implantación del embrión
Pasados 6-7 días desde la fecundación, y cuando el embrión se encuentra en estadio de blastocisto, éste se implanta en el endometrio. Para que esto ocurra, tiene que haber receptividad endometrial, es decir, una perfecta sincronización entre el endometrio y el embrión.
El grosor óptimo del endometrio, para que facilitar la implantación el embrión, es de aproximadamente de 7 a 10mm de espesor. Uno que tenga menos de 6mm puede no permitirlo.
Principales patologías y enfermedades del endometrio
El endometrio tiene un papel fundamental en la fertilidad femenina, pero en algunos casos puede sufrir algunas alteraciones en la mujer, durante su etapa reproductiva.
- Endometriosis: aparición y crecimiento del tejido endometrial fuera de la matriz, pudiendo afectar a otras zonas del organismo, como los ovarios, las trompas de Falopio, el intestino grueso, la vejiga o el estómago.
- Pólipos endometriales: el crecimiento excesivo de las células en el endometrio produce la formación de pólipos. Suelen ser benignos, aunque algunos, con el tiempo pueden convertirse en pólipos precancerosos.
- Mioma uterino: se refiere al tumor benigno que crece en el tejido muscular del miometrio.