La transferencia embrionaria en los ciclos de Fecundación In Vitro es el último paso del tratamiento, y puede realizarse el día 3 o el día 5 de cultivo. Aunque la elección de un día u otro depende de varios factores y del especialista, los pacientes se preguntan a menudo cuándo es mejor realizar la transferencia.
Tras la fecundación de los ovocitos con los espermatozoides de la pareja (o de un donante), los embriones resultantes se dejan en cultivo, de 3 a 6 días, y los especialistas van controlando su evolución hasta la transferencia.
En un embarazo natural, la fecundación se produce en las trompas de Falopio, y no es hasta el 5 día cuando el embrión llega al útero y se implanta en el endometrio. Siguiendo esta lógica, se creería que siempre es mejor transferir el embrión el día 5 (estadio de blastocisto). Sin embargo, en los tratamientos de reproducción asistida, los embriones cultivados en el laboratorio tienen un ambiente diferente al que habría en el cuerpo de la mujer, se colocan en unas placas que contienen un líquido – el medio de cultivo- y que está lleno de nutrientes para que el embrión siga dividiéndose correctamente. Por esto, es el especialista quien, observando su evolución, determina qué día es el idóneo para transferirlo en el útero materno.
¿Qué día es mejor transferir los embriones en una Fecundación In Vitro?
Algunos embriones, los que son metabólicamente más débiles, aunque sean sanos, se transfieren el día 3, dándole al embrión la posibilidad de implantarse. Una de las ventajas de mantener los embriones 3 días en cultivo, es que hay un mayor número de embriones disponibles, pues a medida que pasan los días, algunos pueden detener su desarrollo y dejarían de ser viables.
El cultivo a blastocisto –hasta el 5º o 6º día- favorece la selección de los embriones de mayor calidad para, posteriormente, implantarlo en el útero. De esta manera se aumentan significativamente las posibilidades de lograr la gestación y disminuye el riesgo de gestación múltiple. El cultivo hasta blastocisto se lleva a cabo cuando hay un número mínimo de embriones, y cuando la evolución de éstos en los días previos demuestra que el cultivo se puede alargar hasta el quinto día.
Tal y como afirma la Directora Médica de Clínicas EVA, Fulvia Mancini, es mejor transferir en el quinto día, en aquellos casos en los que hayan más de 5 embriones de calidad, cuando se ha desarrollado un síndrome de hiperestimulación leve, o cuando se repite el fallo de implantación en ciclos anteriores.
En todo caso, la duración del cultivo embrionario dependerá en cada caso, siendo el embriólogo quien decida cuándo es mejor transferir los embriones en una Fecundación In Vitro.