El éxito o no de un tratamiento de Fecundación In Vitro puede depender de distintos factores, además de los elementos cuya responsabilidad recae en los especialistas, también hay que tener especial cuidado con otros factores que pueden influenciar en el resultado final del tratamiento, como el estilo de vida de la paciente o la alimentación. Una prueba de ello la hemos conocido de la mano de un nuevo estudio publicado en ‘Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism’, que concluye afirmando que la falta de vitamina D reduce el éxito de la FIV. Las mujeres con deficiencia de vitamina D tienen casi la mitad de probabilidades de concebir mediante Fecundación In Vitro (FIV) que las que registran niveles suficientes de esta vitamina.
¿Por qué la falta de vitamina D reduce el éxito de la FIV?
La vitamina D es una hormona esteroide que se perfila como un factor en la fertilidad. Los estudios en animales demostraron que esta hormona, que se produce en la piel como resultado de la exposición al sol, además de que es absorbida de algunos alimentos, afecta a la fertilidad en muchos mamíferos.
Para examinar el papel de la vitamina D en la fertilidad humana, investigadores italianos estudiaron a mujeres sometidas a FIV, “Nuestro trabajo es el estudio más grande hasta la fecha que analiza cómo la vitamina D afecta a la fertilidad en las mujeres que se someten a FIV”, destacó uno de los autores del estudio, Alessio Paffoni, del ‘Ospedale Maggiore Policlinico’ en Milán, Italia. “Hemos encontrado que las mujeres que poseían niveles suficientes de vitamina D eran más propensas a producir embriones de alta calidad y presentaban más probabilidades de quedar embarazadas que las mujeres que eran deficientes en vitamina D”, agregó.
Los investigadores examinaron el éxito de los procedimientos de Fecundación In Vitro en 154 mujeres que eran deficientes en vitamina D en su sangre y 181 que poseían niveles suficientes. Las mujeres que presentaban niveles de vitamina D de al menos 20 ng/ml en la sangre se consideraron sin deficiencias de esta vitamina, aunque se recomiendan niveles de 30 ng/ml de vitamina D para la salud general. Las mujeres que registraban niveles suficientes de vitamina D tenían el doble de probabilidades de concebir que sus contrapartes con deficiencia de esta vitamina. Dado que las mujeres con niveles suficientes de la hormona tenían más probabilidades de producir embriones de alta calidad, los científicos de este trabajo teorizaron que la vitamina D participa en la producción de óvulos de calidad en los ovarios, así como en el éxito de la implantación de los embriones en el útero.
Alimentos que contienen vitamina D: los pescados grasos (atún, salmón y caballa) están entre las mejores fuentes de vitamina D. El hígado de res, el queso y las yemas de los huevos suministran pequeñas cantidades.