La exploración emocional es importante cuando una pareja se embarca en la búsqueda de un hijo. Aparentemente ambas partes viven esta decisión bajo las mismas perspectivas, pero no es así en su totalidad.
En cualquiera de las condiciones (de forma natural o a partir de un tratamiento de fertilidad), la vivencia de tener un hijo varía entre un miembro y otro de la pareja. A través de estas experiencias comenzamos a apreciar características personales de la pareja que hasta el momento desconocemos, pues la llegada de un niño implica afrontar nuevas situaciones de responsabilidad.
Este aspecto cobra una mayor relevancia cuando nos encontramos con parejas que deben acudir a un tratamiento de fertilidad para hacer realidad el proyecto común de ser padres.
En este punto es importante que ambos miembros de la pareja reflexionen sobre los siguientes aspectos:
- Motivación personal ante la idea de ser padre/madre.
- Preparación personal para la aceptación de la frustración.
- Apoyar emocionalmente a la pareja.
- Aceptación de las posibles dudas que puedan surgir por parte de la pareja.
Los tratamientos de fertilidad implican que las personas vivan con incertidumbre los resultados finales del mismo, y este aspecto implica que puedan aparecer alteraciones en el estado de ánimo que deben ser entendidos como parte natural del proceso y ser respetados para evitar que aparezcan sentimientos de culpabilidad por manifestar estas emociones.
Aspectos a tener cuenta en la Exploración emocional
- Comunicación: Hablar con la pareja de todo aquello que despierta preocupación. Cualquier emoción es importante. No hay que tener miedo a compartirla.
- Empatizar: Evitar cualquier tipo de recriminación ante las manifestaciones de la pareja. Ponerse en el lugar del otro nos ayuda entender mejor la situación.
- Actitud Positiva. Vivir el proceso de modo positivo. La transmisión de emociones positivas estimula la preparación del organismo y mejora los resultados del tratamiento.