El síndrome del ovario poliquístico es una enfermedad que produce un desequilibrio en las hormonas sexuales. Algunos de los principales síntomas de esta enfermedad son alteraciones en los ciclos menstruales, quistes en los ovarios y dificultades para concebir.
Las mujeres con el síndrome del ovario poliquístico tienen más posibilidades de sufrir abortos repetidos y abortos espontáneos durante el primer trimestre de embarazo, por lo que es importante llevar un embarazo controlado por un especialista.
La fertilidad de las mujeres que padecen el síndrome del ovario poliquístico (SOP) se ve afectada y puede ser una preocupación a la hora de buscar el embarazo. Sin embargo, tener SOP no implica ser infértil, con el tratamiento adecuado se puede lograr el embarazo.
Diferencias entre ovarios poliquísticos y síndrome del ovario poliquístico
Aunque ambos pueden generar problemas a la hora de concebir, los ovarios poliquísticos y el síndrome del ovario poliquístico presentan diferencias.
Los ovarios poliquísticos se caracterizan por la alta presencia de microquistes en los ovarios. Se considera que una mujer tiene ovarios poliquísticos cuando se observan más de 8 quistes cuyo diámetro no alcanza más de 10 milímetros.
Cuando los ovarios poliquísticos van acompañados de niveles hormonales alterados, se trata del síndrome de ovarios poliquísticos.
¿Cómo saber si tengo ovarios poliquísticos?
Los síntomas de los ovarios políquisticos se manifiestan entre los 20 y los 30 años. El síntoma más frecuente es presentar ciclos menstruales irregulares como: ciclos menstruales de más de 35 días (oligomenorrea), ciclos menstruales pequeños inferiores a 24 días (polimenorrea), menstruaciones abundantes (hipermenorrea), y ausencia de menstruación (amenorrea).
Otros síntomas:
- Vello corporal en zonas como el pecho, el abdomen y la cara
- Acné en cara, tórax o espalda
- Caída del cuero cabelludo
- Aumento de peso, dificultad para bajar de peso
