Efectos psicológicos de la Inseminación Artificial

Es importante que la atención psicológica esté presente en las distintas fases del tratamiento de Inseminación Artificial, tanto en el momento de la toma de decisión, como durante todo el proceso. La psicóloga EVA de Girona nos explica por qué.

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Cuando una mujer o pareja se somete a un tratamiento de inseminación artificial, el apoyo psicológico es muy importante y es por este motivo que desde la clínica se ofrece el recurso de apoyo psicológico como complemento durante todo el proceso, pues pueden surgir efectos psicológicos de la Inseminación Artificial.

Es cierto que en situaciones de abortos o durante el tiempo de espera para obtener los resultados de un tratamiento, la atención psicológica es clave, pero no debemos olvidar que cuando una pareja o una madre soltera se plantean la inseminación artificial con o sin donante también sienten como se remueven en su interior aspectos emocionales y vitales a tratar en la consulta del psicólogo. Esta atención psicológica es importante que esté presente en las distintas fases del tratamiento tanto en el momento de la toma de decisión, como durante todo el proceso.

En la fase previa del proceso pueden inundar las dudas respecto al resultado que se va a obtener, se pueden tener muchas creencias negativas o se puede negativizar el nuevo proceso al recordar intentos fallidos anteriores.

Al inicio del proceso tanto el futuro padre como sobretodo la futura madre, se enfrentan a un proceso para concebir que deja de ser un acto íntimo para pasar a ser un conjunto de acciones sin intimidad de pareja y en un ambiente sanitario. Tampoco debemos olvidar que el hecho de que los gametos puedan proceder de una tercera persona externa a la pareja también puede tener repercusiones a nivel de sentimientos de impotencia, de incapacidad, de frustración o de angustia, principalmente.

Efectos psicológicos de la Inseminación Artificial

En el caso de los hombres estos sentimientos se agravan debido a que si los gametos de donante son masculinos el futuro padre puede sentirse aislado o arrinconado ya que su aportación respeto al futuro bebe no podrá cuantificarse a nivel “genético”, aunque obviamente sí, a nivel emocional y psicológico. También hay que tener en cuenta que cuando hay un donante masculino, el miembro masculino de la pareja también puede ver atacada su virilidad, su auto concepto y su autoestima.

Durante el proceso de inseminación artificial, la ansiedad, el miedo, el estrés y la agitación invaden a la pareja y a la madre. También se viven y se sienten muchos otros sentimientos y pensamientos relacionados con la falta de certeza enfrente la identidad del donante y en cómo la genética de este puede afectar al futuro bebé, tanto a nivel de apariencia física, como a un nivel más psicológico.

En todas estas fases y momentos del proceso de inseminación, utilizar adecuadamente los recursos y las herramientas psicológicas tanto propias como externas, ayuda al control de los pensamientos negativos y limitadores, aspecto básico para sobrellevar adecuadamente el tratamiento.

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