Para lograr el embarazo es importante saber calcular tus días fértiles, conocer tu ciclo de ovulación y aprender a identificar las distintas etapas de tu ciclo menstrual.
Cuando una pareja busca el embarazo, los especialistas aconsejan que tengan una actividad sexual habitual. Sin embargo, si se quieren programar las relaciones para lograr el embarazo, es importante saber cuándo se produce la ovulación.
¿Cuándo se produce la ovulación?
La ovulación ocurre una vez durante cada ciclo menstrual de la mujer, generalmente a mitad de este, y se considera como el momento de más alta fertilidad de la mujer.
Si tienes un ciclo regular (28 días) tu ovulación tendrá lugar hacia la mitad del ciclo, es decir, 14 días después del primer día de menstruación. Pero si tu ciclo es más largo, por ejemplo 34 días, la ovulación se producirá alrededor del día 20 y no en la mitad del ciclo.
Si tu menstruación es regular existe un sencillo método para detectar cuáles son tus días más fértiles. Hablamos del método de calendario de fertilidad u Ogino-Knaus que consiste en anotar en un calendario el día en el que aparece la menstruación. Es necesario repetir este proceso durante tres o cuatro meses como mínimo para comprobar que los ciclos menstruales tienen la misma duración. Si tu regla es muy irregular el calendario de fertilidad no es efectivo. Partiendo de esta información, cabe señalar que los días más fértiles son aquellos más cercanos a la ovulación, los cuatro anteriores y los tres posteriores.
¿Y si soy irregular?
Aproximadamente un 30% de las mujeres tienen ciclos menstruales irregular. Según la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia un ciclo irregular es aquel que dura menos de 21 días o más de 35 días. La irregularidad puede darse por factores emocionales y ser ocasional, o puede ser permanente por ejemplo en mujeres que padezcan diabetes, anemia, problemas de tiroides, entre otras causas.
Cuando la mujer tiene ciclos menstruales irregulares es difícil calcular los días fértiles con un calendario de ovulación. Pero, a veces, pueden detectarse a través de estos síntomas corporales:
- Cambios en el flujo vaginal: en la ovulación el flujo de la mujer aumenta y su textura es más viscosa. Este flujo proviene del moco cervical, que se prepara para que se pueda producir la fecundación.
El flujo vaginal es el encargado de proporcionar un entorno adecuado para que los espermatozoides se desplacen fácilmente. Cuando la mujer está en los días de ovulación el moco cervical tiene una textura más resbaladiza de lo habitual, similar a la de una clara de huevo. - Malestar en la zona baja del vientre: no todas las mujeres presentan este síntoma, pero algunas durante la ovulación sienten malestar o incluso sensación de pinchazo en una de las fosas ilíacas, dependiendo del ovario en el que se ha producido la ovulación.
- Cambios en la temperatura basal: este método consiste en controlar la temperatura corporal diariamente nada más despertarse. En el momento de la ovulación el cuerpo aumenta de temperatura de 0, 2º a 0, 5º.
También existen test de ovulación, basados en la detección de cambios hormonales para conocer tus días fértiles. Estos test se adquieren en farmacia y son los siguientes:
- Test de ovulación de LH: es un test de orina que mide la presencia de la hormona luteinizante (LH), responsable de que se produzca la ovulación. Este test es desechable y solo sirve para un mes.
- Test de ovulación de estrógenos: este test se basa en la determinación de estrógenos en la saliva o en el flujo vaginal de la mujer. Con este test se puede detectar la ovulación tres o cuatro días antes de que se produzca.