Los problemas de fertilidad afectan actualmente al 15% aproximadamente de las parejas en edad fértil. Cuando una pareja decide acudir a solicitar ayuda para poder tener un hijo, comienza un camino en el que la estabilidad emocional juega un papel importante para que el resultado sea el esperado.
Durante el proceso de diagnóstico y el desarrollo del tratamiento de reproducción asistida la vida de la pareja sufrirá ciertas modificaciones. Es importante que estos cambios se vivan de manera positiva para evitar el aumento de ansiedad durante este período.
La ansiedad es una de las dificultades más habituales de los tratamientos de fertilidad, ya que puede influir en la fisiología del proceso de embarazo, disminuyendo, por ejemplo, la cantidad de esperma en el varón, o impidiendo el crecimiento adecuado de un óvulo en la mujer.
Para evitar que la ansiedad influya negativamente en el tratamiento, es de vital importancia recibir un tratamiento psicológico que les guíe mediante diferentes técnicas y herramientas.
Algunas recomendaciones que podrían ayudar a reducir la ansiedad son:
- Realizar tareas que nos gusten. Al menos una hora al día dedicarla a realizar alguna tarea que requiera cierto nivel de atención y que sea agradable para poder centrar los pensamientos en esa tarea.
- Tener buenos hábitos de sueño y alimentación. La regulación del sueño influye en el ciclo y equilibrio hormonal de la mujer, aspectos primordiales en la fertilidad femenina. Una alimentación equilibrada hará que se dispongan de los nutrientes necesarios para un buen estado físico.
- Realizar algún ejercicio o técnica de relajación. Ejercicios como el yoga o taichi, aportarán la relajación necesaria para disminuir la ansiedad. En caso de no disponer mucho tiempo, se pueden realizar técnicas de relajación en casa que aportarán beneficios similares.
- Aumentar la actividad social. Disfrutar de reuniones con amigos y familiares, ocupar parte de nuestro tiempo como actividades que actúen como distractores para desviar nuestros pensamientos negativos.
- Vida en pareja. Disfrutar de la pareja y de una vida sexual sana. Es importante la comunicación, que expresemos nuestros miedos y sentimientos para favorecer el acercamiento y disminuir la ansiedad que nos puede causar la dificultad para concebir.
Estas recomendaciones junto a un estilo de vida saludable y un tratamiento psicológico personalizado permiten mejorar las probabilidades de éxito.
