El ácido fólico es una vitamina hidrosoluble del complejo de vitaminas B, esencial para la buena salud de la madre y del futuro bebé. ¿Para qué sirve? ¿Cómo debemos tomarlo? ¿Qué alimentos contienen esta vitamina de manera natural?
El estado nutricional de la mujer antes y durante el embarazo influye en el crecimiento y el desarrollo del feto. Entre las recomendaciones médicas, el ácido fólico es una vitamina esencial para el crecimiento de las células, y producción y reparación del ADN. A aquellas mujeres que están embarazadas o buscan el embarazo se les conciencian de la importancia de incluir el ácido fólico en la alimentación antes del embarazo porque puede prevenir algunas enfermedades en el futuro bebé, además de evitar el parto prematuro. Principalmente, el ácido fólico previene los defectos del tubo neural – a partir del cual se origina el sistema nervioso- y que ocurren en una etapa temprana del desarrollo del feto, incluso antes de que sepan que están embarazadas.
El ácido fólico es fundamental para la producción normal de glóbulos rojos. La deficiencia de esta vitamina puede derivar en complicaciones como anemia y defectos congénitos graves en la médula espinal y en el cerebro del feto.
Aunque el ácido fólico se encuentra de manera natural en algunos alimentos, éstos no contienen la cantidad diaria necesaria de esta vitamina, por lo que se recomienda tomar suplementos vitamínicos antes y durante el embarazo.
¿Cuánto necesitamos?
Siempre teniendo en cuenta que las recomendaciones específicas dependen de cada paciente, el Consejo de Alimentos y Nutrición del Instituto de Medicina aconseja que todas las mujeres, desde que empiezan a buscar el embarazo hasta el primer trimestre de gestación, deberían tomar suplementos de ácido fólico, aproximadamente 400 microgramos al día.
Ácido fólico en la alimentación
Además de la suplementación, existen varios alimentos que contienen este nutriente esencial. Los alimentos con mayor cantidad de ácido fólico son las verduras de hojas verdes (espinacas, acelgas), además de las legumbres (lentejas), cítricos y cereales integrales.
Sin embargo, aunque la mujer incluya estos alimentos en su dieta, sólo mediante la alimentación no consigue obtener la cantidad necesaria de esta vitamina: una gran parte de los folatos que contienen estos alimentos se eliminan por el almacenamiento o la cocción. Por esto, y como indican los especialistas, es necesaria la suplementación de ácido fólico acompañada de una dieta saludable y rica en B9.
